El impacto de esta decisión ha sido profundo y ha generado una gran conmoción dentro de la corporación policial y en la comunidad local. A pesar de los intentos del alcalde Santos González de revertir la medida a través de manifestaciones de descontento, la determinación del Gobernador Durazo es firme. La política establecida requiere que los policías municipales que deseen continuar en el servicio deben completar un curso de formación de un mes en Hermosillo. Aquellos que aprueben el curso serán reasignados como policías estatales en otras partes del estado. Sin embargo, para aquellos que prefieran quedarse en San Luis Río Colorado, la única alternativa es presentar su renuncia.
Esta decisión representa un golpe significativo para el alcalde Santos González, quien está terminando su mandato en medio de un ambiente de tensión y controversia. La implementación del mando único ha sido vista por muchos como una medida necesaria para abordar la crisis de seguridad que ha afectado a la región bajo su administración. La situación ha sido tan grave que incluso su incondicional secretario, Sandoval, hermano del ahora electo alcalde Iván Sandoval, ha mantenido una distancia prudente, subrayando la magnitud del descontento y la desconfianza hacia la administración saliente.
El final del mandato de Santos González se caracteriza por una serie de conflictos, abandonos y fricciones que han marcado su tiempo en el cargo. Los desafíos de seguridad que enfrentó durante su administración han sido severos, llevando a una situación que muchos consideran insostenible. En este contexto, la medida del Gobernador Durazo ha sido vista como una forma de poner orden y establecer un nuevo enfoque en la seguridad pública.
Por otro lado, esta situación representa una oportunidad para Iván Sandoval, el nuevo alcalde electo, quien asumirá el cargo con la esperanza de traer un cambio positivo en la materia de seguridad. Con la implementación del mando único, se abre una nueva etapa para San Luis Río Colorado, una que, se espera, traerá mejoras significativas en la seguridad y en la confianza de la comunidad en las instituciones locales. Los ciudadanos y líderes locales aguardan con expectativa si las reformas y cambios introducidos resultarán en una verdadera transformación para el bien de San Luis.
Redacción
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